Frente a ti se extiende un estrecho sendero, enclavado en escarpados acantilados, a 100 metros sobre el río. Los puentes colgantes se balancean bajo tus pies mientras caminas a través de impresionantes desfiladeros y poderosas formaciones rocosas. Este sendero, una vez conocido como el más peligroso del mundo, combina emociones con vistas espectaculares, rodeado de la naturaleza prístina del parque nacional.

Un hormigueo en el estómago y un subidón de adrenalina te esperan en senderos que serpentean a lo largo de escarpadas paredes rocosas. Bajo sus pies solo el estrecho puente, rodeado de una naturaleza impresionante. El camino requiere coraje y te recompensa con unas vistas panorámicas incomparables que te dejan sin aliento. Una aventura para excursionistas atrevidos que buscan emociones al aire libre.